Abraza al gran árbol de la vida, fusiónate con el, conviértete en su corteza, su armadura protectora, permanece quieto cien años, olvida como hablar pero no como entender, quédate quieto cien años mas y transformate en sus ramas, disfruta el cambio de las estaciones, permite que mueran y revivan tus hojas, estira los brazos y deja que un pajarillo cante para ti, contempla a la gente morir y nacer, deja que los niños jueguen alrededor de ti, estira tus raíces y has que sobresalgan del suelo, han pasado cien años mas, eres enorme, tan alto como un edificio y tan ancho como una casa, ahora el leñador se aferro a ti, quería derribarte, tardo años, pero lo logro, estas débil  vas a morir, pero puedes revivir, te transformaron en muchas libretas y revivirías si alguien te recuerda allí, justo como yo.